La cordobesa, militante de Franja Morada, quedó al frente de la agrupación universitaria. “Debemos comenzar a utilizar la tecnología como una herramienta de llegada a distintos lugares”, precisó.

La Federación Universitaria Argentina (FUA) renovó sus autoridades en el 31º Congreso Ordinario. La candidata del Frente ReformistaPiera Fernández, fue elegida como nueva presidenta de la agrupación universitaria.

“El proceso de elección lo viví con mucha felicidad, fue una gran alegría poder estar una vez más renovando las autoridades de la FUA y ver reunidos a estudiantes de cada rincón del país que habían llegado para formar parte de este proceso”, comentó a Espacio Radical.

La flamante presidenta electa es oriunda de Río Cuarto, Córdoba, tiene 25 años y está por terminar la Licenciatura en Ciencias Políticas en la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC).

Reemplaza al también radical Bernardo Weber, que, como consecuencia de la pandemia, estuvo en el cargo cuatro años y medio con mandatos prorrogados. 

Cambios y desafíos

Respecto a los cambios necesarios en FUA, Fernández advirtió que “es necesario un proceso de transformación producto del contexto de la pospandemia”.

“Luego de este largo periodo, tenemos que recuperar la posibilidad de fortalecer los vínculos con el territorio en cada rincón del país y comenzar a utilizar la tecnología como una herramienta de llegada a un montón de lugares”, definió.

“Es momento de apostar a los procesos de normalización de los centros de estudiantes para que tengan sus elecciones de manera participativa, transparente y con una agenda que incluya a la paridad de género como epicentro, como una conquista para todos los centros de estudiantes del país”, agregó.

Dentro de los desafíos buscará “construir consensos que promuevan la unidad del movimiento estudiantil”.

Los objetivos de la gestión

Afirmó que trabajarán con dos grandes ejes muy anclados en la situación actual del país y del mundo. 

El primero tiene que ver con una agenda de modernización e innovación tecnológica: “Queremos trabajar para que las universidades públicas incorporen la innovación tecnológica, tanto en la formación de grado como en los procesos de investigación de posgrado”, afirmó.

“Este objetivo conlleva planes de inversión en infraestructura que nos permitan erradicar la brecha digital, generar trayectos académicos más breves, formación en oficios, la innovación curricular incorporando la perspectiva de género y una mirada ecológica sustentable para las universidades”, detalló.

El otro eje será mantener la histórica lucha por la defensa del rol social que mantiene el reformismo.

“Es importante tener a la universidad pública como herramienta de inclusión y de oportunidades. En ese sentido, vamos a trabajar en la extensión en el acceso a la cultura y en la defensa inclaudicable del presupuesto universitario que viene perdiendo contra la inflación año tras año”, explicó.