Así, las causas llegarán por sorteo a las distintas salas. Además, el presidente ejercerá como juez, algo que hasta ahora no ocurría. De no mediar inconvenientes, los cambios se implementarán el 1º de junio de 2023.

El proyecto de reforma de la Suprema Corte impulsado por el gobernador radical Rodolfo Suarez que tiene como objetivo “transparentar y agilizar” la Justicia fue aprobado por amplia mayoría en ambas cámaras del palacio legislativo provincial.

“Todo eso hace un proceso mucho más transparente y eficaz”, comentó la diputada María José Sanz a Espacio Radical.

A partir de la entrada en vigencia de la ley, la Suprema Corte funcionará a través de sorteo como un Colegio de Jueces para el conocimiento de todas las causas que le sean sometidas por vía de acción o recurso, a excepción de los casos previstos para el funcionamiento y la sentencia en pleno.

La norma modifica la Ley 4.969 de Composición de la Suprema Corte de Justicia y reorganiza el funcionamiento de las salas de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza para que se sortee entre los siete integrantes quiénes intervendrán en cada causa.

“Con estas modificaciones, los demandantes ya no podrán elegir en qué salas ingresará su caso, sino que todo va a ser bajo sorteo”, explicó Sanz, y agregó: “Además, el presidente de la Corte dejará de cumplir funciones solamente administrativas y comenzará a actuar verdaderamente como lo que es, un juez”.

Previó a su tratamiento en la Legislatura Provincial, el proyecto fue sometido a un amplio debate e, incluso, obtuvo el acuerdo entre los jueces del máximo tribunal, quienes presentaron una propuesta superadora, que no prosperó, pero sí incluyó modificaciones al proyecto inicial de Suarez.

En el Senado, la ley fue defendida por la senadora de la UCR Mercedes Rus, quien puso en valor el acuerdo al que se llegó entre todos los sectores: “Entiendo que esta propuesta resuelve problemas de funcionamiento de la Corte en el último estrato de poder que faltaba y hace a un mejor servicio de justicia”, planteó oportunamente.

Entre los principales cambios se estableció avanzar de manera progresiva. Así, durante un año se mantendrán las salas especializadas, y, por ahora, los sorteos se realizarán exclusivamente con las causas “contenciosas-administrativas”.

En el resto de los fueros, este cambio entrará en vigencia el 1º de julio de 2023, previa decisión del pleno del máximo tribunal. En caso de no acordar, ese cambio se instrumentará el 1º de diciembre del año próximo. Asimismo, se dispuso que todas las acciones de inconstitucionalidad se elevarán a fallo plenario.

Además, la iniciativa establece que la elección del presidente de la Corte, quien tendrá participación activa en las causas, se hará con una primera votación, con mayoría de 5 a 2. En caso de no acordar, habrá una segunda votación similar. De no llegar a una resolución, la votación será por mayoría simple.

Se elegirán dos vicepresidentes por mayoría simple, es decir, 4 a 3, excluyendo de esa instancia al presidente elegido, salvo que se produzca un empate. Para Sanz, estas modificaciones “le otorgan al sistema judicial muchísima más transparencia”.