Actual concejal, quiere llegar a la Intendencia en las elecciones del 7 de agosto. Es la única mujer que aspira a ese cargo. Propone mejorar la infraestructura y hacer un Municipio de puertas abiertas. “La gente sabe que cumplimos nuestras promesas”, aseguró.

Belén Pinto milita en el radicalismo desde hace casi 10 años, es abogada y actualmente se desempeña como concejal. Además, es miembro de la mesa ejecutiva de la Juventud Radical (JR) nacional. Forma parte del sector Evolución Radical que a nivel nacional es liderado por Martín Lousteau.

Es la única mujer candidata a la Intendencia en las elecciones que se llevarán a cabo el 7 de agosto. Buscará gobernar la ciudad santiagueña de Loreto, conocida como la capital nacional del Rosquete (masa dulce, redonda y con un pequeño círculo en el medio que está cubierta con merengue), luego de cuatro años de intenso trabajo en el Concejo Deliberante local.


Sus inicios en el radicalismo

Pinto comenzó su militancia en el radicalismo en los últimos años de su carrera universitaria como abogada, cuando tenía 22 años y se dio cuenta “de que la política era la principal herramienta de transformación social”.

“Mi primera actividad partidaria fue como fiscal general del departamento de Loreto, en las elecciones de 2013, que llevaban como candidato a gobernador de Santiago a Emilio Rached”, rememoró.

También recordó cuando, en aquellos comienzos, llegó a conocer a los principales exponentes de la Unión Cívica Radical en su provincia. “Con la figura de Emilio, me di cuenta de que era posible gobernar con transparencia y honestidad”, agregó.


Su carrera en Loreto

Durante las elecciones locales de 2014, fue parte de la lista de UNEN como candidata a concejal, en las que, si bien no logró obtener la banca en el Concejo Deliberante de Loreto, destaca la experiencia que adquirió durante el trabajo de campaña.

Luego continúo su militancia hasta que, en 2018, decidió volver a postularse: “Veía con mucha preocupación la situación de mi ciudad y decidí ser nuevamente candidata junto a un grupo de concejales”, contó.

“Queríamos acompañar al intendente que resultara electo, aconsejarlo como ediles y también llevarle la voz de la gente”, agregó. 

En aquella oportunidad, logró ingresar al Concejo Deliberante mediante las propuestas e ideas que presentó a lo largo de la campaña. Durante sus años como concejal cosechó experiencia y generó un vínculo con vecinos y vecinas.

Este año finaliza su gestión como edil y, en lugar de renovar la banca, optó por buscar el sillón de la Intendencia y convertirse en la primera mujer de la ciudad en ocupar ese rol.

“Podía haberme quedado en mi posición cómoda como concejal, pero me di cuenta de que desde el Concejo municipal no se puede hacer lo suficiente para mejorar la vida de la gente”, confesó.


El camino a la intendencia

Luego de anunciar su candidatura, según las encuestas, su intención de voto creció casi un 60% de cara a las elecciones locales del 7 de agosto. “Lo más importante es que la gente nos conoce, sabe que cumplimos nuestras promesas y compromisos”, aseguró.

Dentro de sus ejes de trabajo propone abrir las puertas del Municipio: “Buscamos construir una Municipalidad de puertas abiertas, que escuche a las y los vecinos, lo que conlleva un plan en educación, salud y desarrollo urbano”, plantea.

Otro gran objetivo es pensar a Loreto como una ciudad de desarrollo. Para esto, apuntará a la construcción de una planta potabilizadora de agua, obras de pavimentación y un plan para convertirla en una ciudad turística.

“Actualmente, no tiene la infraestructura para soportar un gran número de turistas, por eso desarrollaremos un plan para mejorar la capacidad de la ciudad y generar puestos de trabajo genuinos”, concluyó.