La mirada de Ariel Santurio, secretario General de OTR
En diálogo con Espacio Radical, hizo un repaso por los logros de la gestión anterior, contó cómo se trabaja en materia de género, expresó la intención de hacer bien federal a la Organización y planteó sus desafío.
En diálogo con Espacio Radical, hizo un repaso por los logros de la gestión anterior, contó cómo se trabaja en materia de género, expresó la intención de hacer bien federal a la Organización y planteó sus desafío.
Ariel Santurio es personal no docente y milita en la Asociación del Personal de la Universidad de Buenos Aires (APUBA). Desarrolla su tarea en el Ciclo Básico Común (CBC). Ahora, enfrenta el gran desafío de conducir la Organización de Trabajadores Radicales (OTR).
A casi seis meses de comenzar su gestión, el dirigente radical valoró la convocatoria del Comité Nacional del partido al organismo para sumarse a la Mesa Nacional junto a la Juventud Radical y a la Franja Morada.
“Desde mi punto de vista fue algo muy positivo el interés del partido en que esté la Organización esté dentro de la Mesa, junto al resto de los órganos, que yo llamo sindicales: la Juventud y la Franja”, comentó en diálogo con Espacio Radical.
Sobre la gestión anterior
Santurio reconoció el gran trabajo realizado por Javier Varetto al frente de la organización sindical del partido.
“Realizó una gestión muy generosa, tuve el placer de acompañarlo como secretario del Interior y todo el tiempo estamos trabajando para poder llegar a aquellos lugares donde no hubiera OTR provincial y poder fundar nuevas”, expresó.
“Junto a Luis Cerini, actual secretario del Interior, queremos continuar con ese trabajo recorriendo el país para llevar cada vez a más provincias esta militancia sindical del radicalismo”.
La posición de la OTR en el territorio nacional
“Durante este periodo, pudimos tener una serie de relaciones con distintos dirigentes del partido, además de establecer reuniones con diputados, diputadas, senadores y senadoras”, afirmó.
También anunció que realizarán viajes por todo el país para poder llegar a cada rincón donde pueda hacer falta representación sindical partidaria.
“Nuestra idea es poder generar una OTR cada vez más federal y con presencia en todo el país”.
Actualmente, hay seccionales de la OTR en Córdoba, Mendoza, San Luis, Catamarca, Tucumán, Chaco, Corrientes, Entre Ríos, Santa Fe, Buenos Aires, CABA, Tierra del Fuego y Salta.
“Estamos trabajando para poder llegar a nuevos comités en Rio Negro y Neuquén, si la militancia continúa empujando para que suceda”, se comprometió.
Género y diversidad
“Dentro de la OTR, se viene marcando un camino para darle mayor participación a la mujer dentro de los órganos de conducción sindical y sobre todo dentro de la Organización”, reflexionó.
Este año, en las seccionales se implementó un sistema de doble Secretaría General, ocupadas cada una por alguien de otro género, en igualdad de condiciones buscando que se respete la paridad.
“Para poder trabajar y hacer a la paridad cada vez más visible es importante contar con más mujeres dentro de los organismos de representación sindical, no solamente del partido sino a nivel de los distintos sindicatos”, aclaró.
Por primera vez, en la Secretaría de Diversidad de la OTR nacional hay un secretario hombre y una mujer, fruto de un convenio con UCR Diversidad.
“Poder establecer distintas miradas respecto a la lucha de la mujer, las diversidades y género dentro de un organismo tan machista como el sindicalismo argentino es un lindo desafío y, sobre todo, una meta que estamos consiguiendo”.
Los objetivos
Santurio aspira a “acercar a más trabajadoras y trabajadores a la militancia de la OTR, hacer conocer a la organización y mostrarle a la sociedad, y sobre todo a las trabajadoras y a los trabajadores, que hay un organismo este partidario con mucha militancia sindical”.
“Debemos seguir siendo la voz de los trabajadores y de los representantes de los trabajadores dentro del partido a nivel nacional. Necesitamos tener voz y voto en cada espacio de militancia”, detalló.
Como objetivo de máxima, aspira a “conseguir la democratización total de las organizaciones sindicales que, hoy por hoy, son democráticas, pero no tanto”.